Protestaron contra las acciones de varios técnicos de la Administración provincial
La FMC apoyando a la marea naranja de cazadores y pescadores por Guadalajara
El 20 de mayo, en Guadalajara y convocada por Atica Guadalajara, tuvo lugar una manifestación de cazadores y pescadores que, en número de 2.500 personas presentes, protestaron contra las acciones de varios técnicos de la Administración provincial.
Manifiesto de la Caza y Pesca por el mundo Rural
Los cazadores de Guadalajara denunciamos las resoluciones arbitrarias de los dos técnicos de la sección de Caza en la Dirección Provincial de Agricultura de Guadalajara, David Sánchez, Susana Ayuso, que perjudican gravemente a todo el sector cinegético y al desarrollo del mundo rural de esta provincia. Imponen prohibiciones que no están legisladas y lo hacen de manera discriminatoria, solo para la provincia de Guadalajara, cuando la legislación a aplicar es la misma para toda Castilla-La Mancha.
Llevamos más de cinco años denunciando esta situación en los Consejos de Caza, sin que el responsable político de turno, ahora el director provincial de Agricultura, Santos López Tabernero, adopte medidas al respecto contra esta injusticia que entendemos que por lo tanto consiente.
Nuestra denuncia se ciñe solo a estos dos técnicos de la sección de Caza, cuyo cese en la sección de caza y pesca exigimos, que no al resto del personal laboral o funcionarial de la Dirección Provincial de Agricultura en Guadalajara.
Como ejemplo de las actuaciones de estos técnicos incompetentes, basta con mirar algunas de las injustas medidas que imponen a su capricho en cualquiera de las últimas resoluciones de los planes de ordenación cinegética.
Nos quitan en los planes técnicos especies autorizadas como la becada o nos rebajan cupos de otras especies a su libre interpretación de la ley, como el hecho de prohibirnos la caza del azulón porque dicen que podemos confundirlo con una especie protegida.
Demoran sin motivos las autorizaciones para el control de daños de las especies cinegéticas en cultivos.
Prohiben la suelta de conejos en zonas donde están casi extinguidos y cuya repoblación es totalmente necesaria para el ecosistema. Prohiben en los nuevos planes de caza las sueltas para caza inmediata de perdices, palomas, faisanes o codornices.
Nos dicen que necesitamos la autorización del personal de esa administración para instalar bebederos o comederos en nuestro acotados. Persiguen a los cotos intensivos, limitando sin ningún sentido el número de cazadores y perros y obligando a comunicar las sueltas en contra de la legislación vigente que lo flexibiliza para este tipo de acotados.
Y así un largo etcétera, porque lo suyo es prohibir, prohibir y prohibir, dictando resoluciones que no figuran en ninguna normativa e incluso que son contrarias a la Ley y a esto se le llama prevaricación, por lo que nos estamos planteando denunciar ante los tribunales.
El mundo de la pesca se une a nuestra movilización porque también ellos padecen una situación similar, con otra técnico, Ana Ballester. En toda Guadalajara se les prohíbe la extracción de truchas con cupo y talla reglamentaria. Marcan excepciones particulares a la apertura y cierre de temporada en Guadalajara, limitan a su antojo el sacrificio o no de ciprínidos, ponen mil pegas para la renovación de los planes de pesca y otro largo etcétera.
Con todo esto están acabando con la caza y la pesca en la provincia de Guadalajara donde ya se registra un notable descenso del número de las licencias de caza y pesca, acentuado en los últimos años, que está provocando una pérdida de empleos directos e indirectos que son fundamentales para la subsistencia de nuestros pueblos.
Y esto no solo afecta a la Caza y la Pesca, que son actividades plenamente legales y reguladas, sino que afecta a todo el mundo rural especialmente amenazado en Guadalajara por la despoblación, donde la actividad de cazadores y pescadores suponen una notable fuente de riqueza y de conservación ambiental totalmente ligada al enfoque de un turismo sostenible.
Se cierran granjas cinegéticas, se cierran piscifactorías, se manda al paro a guardas de coto, se cierran bares que gestionaban licencias, y existe una merma de actividad económica en hoteles, restaurantes, gasolineras, veterinarios, comercios especializados… Esto puede ser la puntilla para una provincia agonizante en su territorio más despoblado.
Por todo esto los cazadores y pescadores de Guadalajara decimos hoy bien alto que la Caza y la Pesca está junto al mundo rural y que no vamos a consentir que pisoteen en los despachos nuestros derechos y a nuestra querida provincia.
